domingo, 17 de octubre de 2010

El presidente boliviano Evo morales admite que cocaleros desvían cultivos al narcotráfico

El presidente de Bolivia aceptó que los sindicatos que dirige direccionan parte de su producción a la venta ilegal y aumentan los sembradios al margen de los acuerdos firmados.

En la inauguración de un congreso de campesinos en la zona del Chapare, Morales admitió que los cocaleros a quienes representa tienen vínculos con las actividades del narcotráfico.

"Compañeros: ustedes saben que una parte de nuestra coca desvían al problema ilegal. Si toda nuestra coca tuviera mercado legal, para qué vamos a estar hablando de un cato (parcela controlada)", indicó visiblemente molesto.

El "cato de coca" es igual a 1.600 metros cuadrados cultivados con la planta y es el máximo que puede poseer cada familia campesina en esa región.

Al respecto, el mandatario cuestionó que para aumentar su producción, los campesinos inscriben a niños como propietarios de las parcelas.

En la actualidad, Morales busca modificar la ley antidroga para que a las 12 mil hectáreas legales que hay en los Yungas, en el departamento de La Paz, que se destinan al llamado "consumo cultural de la coca", se sumen las 7 mil del Chapare y otras mil en otros lugares para tener un total de 20 mil en todo el país.

Pero los sindicatos, que tienen otro liderazgo, iniciaron un bloqueo de carreteras desde hace cinco días para enfrentar esa iniciativa y exigir que se elimine definitivamente una resolución que pretendía establecer un control del comercio de la hoja.

Según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), en 2009 las plantaciones de coca en Bolivia llegaron a 30.900 de hectáreas, 1 por ciento más que en 2008.

Sin embargo, otro dato porporcionado por los Estados Unidos señala que el crecimiento fue del 10 por ciento, hasta 35.000 hectáreas. Fuente: IBD

No hay comentarios:

Publicar un comentario