¿QUÉ ES? LA
MENOPAUSIA
A lo largo del siglo XX la esperanza de vida de las mujeres ha ido aumentando.
En España, la población femenina representa un 60% de los mayores de 65 años, lo que significa que cada vez hay más mujeres postmenopáusicas. Esto convierte esta etapa de la vida en un periodo importante desde el punto de vista social, económico y médico.
El término menopausia se refiere al final del perido. Es un proceso fisiológico normal en la mujer que implica el cese de la menstruación y la pérdida de la fertilidad. Tiene lugar entre la quinta y la sexta década de vida normalmente.
El término menopausia se refiere al final del perido. Es un proceso fisiológico normal en la mujer que implica el cese de la menstruación y la pérdida de la fertilidad. Tiene lugar entre la quinta y la sexta década de vida normalmente.
El climaterio es el período de transición, más o menos dilatado, entre la vida fértil y el reposo ovárico. Comienza cuando la mujer detecta las primeras irregularidades en su ciclo menstrual y comprende la premenopausia y la menopausia.
Se denomina menopausia precoz cuando se produce antes de los 35 años, temprana si se da entre los 35 y los 40 y tardía si sucede más allá de los 50 años. En cualquier caso, la llegada de la menopausia y la pérdida de la capacidad reproductiva suponen un cambio significativo en la vida de la mujer.
El cese de la ovulación y de la producción de hormonas sexuales conlleva cambios, no sólo en el aparato reproductor, sino también en el circulatorio, corazón, esqueleto, sistema nervioso, tracto urinario, etc.
Los cambios que producen en
las mujeres con la menopausia
Las reservas de folículos ováricos (vesículas dentro de las cuales maduran los óvulos) son limitadas para cada mujer. Su número disminuye de forma constante durante la vida reproductiva de forma que hacia el final tendrá unos mil folículos en sus ovarios. La menopausia llega cuando se acelera la pérdida de folículos.
Durante la vida fértil, el ovario produce dos tipos de hormonas: estrógenos y progesterona (y una pequeña cantidad de hormonas masculinas). Con la llegada de la menopausia se produce el fallo ovárico que afecta también a la producción hormonal.
Premenopausia
Cuando las reservas se van agotando, los intervalos entre menstruaciones se acortan. La disminución de los folículos provoca una menor secrección de estrógenos e inhibina lo que desencadena una reacción de la hipófisis que trata de compensar este déficit. La fertilidad disminuye.
Postmenopausia
Tras la última menstruación quedan en el ovario un pequeño número de ovocitos que continúan segregando estrógenos durante algún tiempo. Pero después, los niveles de estrógenos y progesterona caen, desencadenando un mecanismo de compensación que logra niveles mínimos y variables según la mujer.
Estos cambios hormonales, conllevan otros trastornos orgánicos y psicológicos que hacen que algunas mujeres padezcan los molestos síntomas de este periodo como sofocos, vaginitis, dispareunia, trastornos de memoria, alteración del metabolismo de lípidos, y un envejecimiento acelerado de la piel.
Se denomina menopausia precoz cuando se produce antes de los 35 años, temprana si se da entre los 35 y los 40 y tardía si sucede más allá de los 50 años. En cualquier caso, la llegada de la menopausia y la pérdida de la capacidad reproductiva suponen un cambio significativo en la vida de la mujer.
El cese de la ovulación y de la producción de hormonas sexuales conlleva cambios, no sólo en el aparato reproductor, sino también en el circulatorio, corazón, esqueleto, sistema nervioso, tracto urinario, etc.
Los cambios que producen en
las mujeres con la menopausia
Las reservas de folículos ováricos (vesículas dentro de las cuales maduran los óvulos) son limitadas para cada mujer. Su número disminuye de forma constante durante la vida reproductiva de forma que hacia el final tendrá unos mil folículos en sus ovarios. La menopausia llega cuando se acelera la pérdida de folículos.
Durante la vida fértil, el ovario produce dos tipos de hormonas: estrógenos y progesterona (y una pequeña cantidad de hormonas masculinas). Con la llegada de la menopausia se produce el fallo ovárico que afecta también a la producción hormonal.
Premenopausia
Cuando las reservas se van agotando, los intervalos entre menstruaciones se acortan. La disminución de los folículos provoca una menor secrección de estrógenos e inhibina lo que desencadena una reacción de la hipófisis que trata de compensar este déficit. La fertilidad disminuye.
Postmenopausia
Tras la última menstruación quedan en el ovario un pequeño número de ovocitos que continúan segregando estrógenos durante algún tiempo. Pero después, los niveles de estrógenos y progesterona caen, desencadenando un mecanismo de compensación que logra niveles mínimos y variables según la mujer.
Estos cambios hormonales, conllevan otros trastornos orgánicos y psicológicos que hacen que algunas mujeres padezcan los molestos síntomas de este periodo como sofocos, vaginitis, dispareunia, trastornos de memoria, alteración del metabolismo de lípidos, y un envejecimiento acelerado de la piel.
Estos síntomas se manifiestan con mayor intensidad y frecuencia al final de la premenopausia. El riesgo de sufrir algunas patologías -osteoporosis, enfermedades cardiovasculares- aumenta, y algunas funciones se alteran -regulación inmune, humor, control glicémico, conducta sexual, cognición.
No hay comentarios:
Publicar un comentario