La cantante de R&R Rihanna, es la invitada especial a una fiesta exclusiva de año nuevo en el hotel Emirates Palace de Abu Dabi. Sin embargo para presentarse deberá cambiar su vestuario.El código de "moral" del
país es conservador
Una gran expectativa generó el concierto que Rihanna, dará en Abu Dabi durante la noche previa al año nuevo.
Buena parte del espectáculo que ofrecen sus actuaciones se debe a su vistosa y provocativa ropa, y es aquí donde llega el problema.
Según publica OTR Press en los últimos días las autoridades de ese país le habrían censurado a la artista algunos de los los trajes que utiliza.
Según publicó el Daily Mirror, Rihanna, ya fue advertida sobre su vestuario y le dijeron que tendrá que vestirse "de forma conservadora" si quiere cantar allí, pues "el código de vestimenta de Abu Dabi, no apoya excesivamente los trajes atrevidos", y su ropa deberá ser adecuados al código "moral" del país.
Según estas informaciones Rihanna, y su equipo ya están buscando una serie de nuevos conjuntos, más recatados, que la cantante pueda lucir en el concierto por el que la artista de Barbados cobrará unos 350 mil euros.
Esta no es la primera vez que la vestimenta de las cantantes levanta polémica en los países de mayoría musulmana.
Beyoncé canceló su concierto en Malaisia el pasado octubre por esta razón; y Gwen Stefani, tuvo que ponerse chaquetas y leotardos para cubrir su cuerpo durante un concierto en ese mismo país.
Una gran expectativa generó el concierto que Rihanna, dará en Abu Dabi durante la noche previa al año nuevo.
Buena parte del espectáculo que ofrecen sus actuaciones se debe a su vistosa y provocativa ropa, y es aquí donde llega el problema.
Según publica OTR Press en los últimos días las autoridades de ese país le habrían censurado a la artista algunos de los los trajes que utiliza.
Según publicó el Daily Mirror, Rihanna, ya fue advertida sobre su vestuario y le dijeron que tendrá que vestirse "de forma conservadora" si quiere cantar allí, pues "el código de vestimenta de Abu Dabi, no apoya excesivamente los trajes atrevidos", y su ropa deberá ser adecuados al código "moral" del país.
Según estas informaciones Rihanna, y su equipo ya están buscando una serie de nuevos conjuntos, más recatados, que la cantante pueda lucir en el concierto por el que la artista de Barbados cobrará unos 350 mil euros.
Esta no es la primera vez que la vestimenta de las cantantes levanta polémica en los países de mayoría musulmana.
Beyoncé canceló su concierto en Malaisia el pasado octubre por esta razón; y Gwen Stefani, tuvo que ponerse chaquetas y leotardos para cubrir su cuerpo durante un concierto en ese mismo país.
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