A pocos días de realizarse una cirugía estética para aumentar el tamaño de sus pechos, Amy Winehouse debió ser internada de urgencia por un problema con sus implantes
A Amy Winehouse le duró poco la felicidad de tener delantera nueva. Horas después de la operación tuvo que ser trasladada de urgencia a un hospital el Londres.
Según reveló la prensa internacional, la cantante de 26 años tuvo un ataque por su miedo a que los implantes se le explotaran.
"¡Mis bubis me están matando!", señaló la polémica morocha en los momentos previos a ingresar en el centro asistencia.
Los médicos verificaron que todo funcione bien y le aconsejaron que descanse y repose por unos días y que evite sus participaciones en el programa Strictly Come Dancing.
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