La primera dama afianza su imagen descontracturada y popular. Estuvo bailando en los jardines de la Casa Blanca para promover un plan de salud infantil. ¿Cuántas vueltas
En los jardines de la Casa Blanca, centenares de niños y padres comprobaron atónitos cómo Michelle Obama le daba 142 vueltas al aro antes de que éste tocara el suelo. Además intervino en juegos de destreza y en carreras.
El motivo de esta singular demostración fue la "Feria de los Niños Sanos", que ofrece pautas para un estilo de vida activo y una alimentación saludable. Con su pintoresco gesto, Michelle Obama defendió así las bondades del ejercicio físico.
"El objetivo es mostrar a los niños los beneficios de una vida saludable tanto por realizando ejercicio físico como llevando una dieta saludable, en la que la comida rápida sea algo ocasional", dijo Michelle luego.
No es la primera vez que la primera dama norteamericana apoya públicamente la comida sana. En marzo comenzó a trabajar en un huerto de vegetales en la Casa Blanca para ayudar a proveer de comida fresca y nutritiva a su familia, a los trabajadores y a los visitantes.
En el encuentro educativo, chefs de todo el país trataron de demostrar que una buena nutrición desde la infancia está al alcance de todos los bolsillos y ayuda al mejor desarrollo de los pequeños.
En determinado momento, se despojó de sus zapatos para poder correr mejor. Todas las actividades las realizó bien, ante el aplauso de los asistentes.
En los jardines de la Casa Blanca, centenares de niños y padres comprobaron atónitos cómo Michelle Obama le daba 142 vueltas al aro antes de que éste tocara el suelo. Además intervino en juegos de destreza y en carreras.
El motivo de esta singular demostración fue la "Feria de los Niños Sanos", que ofrece pautas para un estilo de vida activo y una alimentación saludable. Con su pintoresco gesto, Michelle Obama defendió así las bondades del ejercicio físico.
"El objetivo es mostrar a los niños los beneficios de una vida saludable tanto por realizando ejercicio físico como llevando una dieta saludable, en la que la comida rápida sea algo ocasional", dijo Michelle luego.
No es la primera vez que la primera dama norteamericana apoya públicamente la comida sana. En marzo comenzó a trabajar en un huerto de vegetales en la Casa Blanca para ayudar a proveer de comida fresca y nutritiva a su familia, a los trabajadores y a los visitantes.
En el encuentro educativo, chefs de todo el país trataron de demostrar que una buena nutrición desde la infancia está al alcance de todos los bolsillos y ayuda al mejor desarrollo de los pequeños.
En determinado momento, se despojó de sus zapatos para poder correr mejor. Todas las actividades las realizó bien, ante el aplauso de los asistentes.
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