A cierta edad, las personas comienzan a tener dificultades para ver bien de cerca y advierten una disminución de la capacidad de enfocar los objetos a corta distancia. Cómo sobrellevarlo de la mejor manera posible
Entre los 40 y 45 años la visión sufre un deterioro debido al paso del tiempo. Esto ocurre por la pérdida de elasticidad del músculo ciliar y del cristalino, encargados de accionar el mecanismo de "acomodación" del ojo.
La aparición de la presbicia es inevitable, afecta al 100% de la población mayor de 45 años, incluso a personas que sufren de patologías como miopía, hipermetropía o astigmatismo.
La presbicia es la condición óptica en la cual, debido a los cambios producidos por la edad, disminuye en forma irreversible el poder de acomodación del sistema visual. Comienza a manifestarse claramente debiendo estirar el brazo para alejar lo que se esté leyendo o acercarse a un lugar más iluminado para poder ver con claridad.
El doctor Fernando Giacomini, médico del Hospital Oftalmológico Santa Lucía, sostiene que la presbicia no es una patología, sino un proceso fisiológico relacionado íntimamente con la edad, consecuencia del desgaste del sistema de acomodación visual.
"El ojo tiene una capacidad de acomodar, que en los menores de 40 años permite enfocar objetos a distintas distancias. Con el paso de los años ese mecanismo se altera y se pierde la capacidad de enfocar de cerca, conservando intacta la visión lejana, por eso es necesaria una ayuda óptica", advierte el profesional.
Para corregir esta alteración y disfrutar de una buena calidad visual existen lentes de contacto multifocales que permiten al paciente présbita ver correctamente de lejos, de cerca y a distancias intermedias.
El hecho de no utilizar la debida corrección, podría producir además, otros trastornos visuales como dolores de cabeza y pesadez de párpados, resultado del esfuerzo al que se expone el ojo o el sistema visual para enfocar con mayor nitidez.
Es muy importante usar la graduación que corresponde para cada una de las distancias. Giacomini, quien también colabora como asesor médico en Bausch & Lomb, explica que las lentes multifocales de la compañía permiten una visión excepcional a cualquier distancia gracias a su diseño innovador que facilita una excelente adaptación con cómodo enfoque natural.
Existe en algunas personas temor a ponerse una lente dentro del ojo, pero la práctica se adquiere rápidamente obteniendo con su uso gran comodidad. Además al ser una lente de hidrogel de bajo contenido acuoso, tiene mínima deshidratación, ofreciendo al paciente mayor desempeño de la lente al final del día.
Siempre es necesario que un médico oftalmólogo indique una receta para la compra de este tipo de lentes, pero a su vez la tarea del contactólogo también es fundamental, remarca Giacomini. "Es importante que el contactólogo enseñe al paciente a colocar y quitar la lente y ofrezca las instrucciones necesarias acerca del cuidado y uso de las lentes de contacto".
El avance tecnológico hizo posible que la presbicia se pueda sobrellevar sin inconvenientes.
Entre los 40 y 45 años la visión sufre un deterioro debido al paso del tiempo. Esto ocurre por la pérdida de elasticidad del músculo ciliar y del cristalino, encargados de accionar el mecanismo de "acomodación" del ojo.
La aparición de la presbicia es inevitable, afecta al 100% de la población mayor de 45 años, incluso a personas que sufren de patologías como miopía, hipermetropía o astigmatismo.
La presbicia es la condición óptica en la cual, debido a los cambios producidos por la edad, disminuye en forma irreversible el poder de acomodación del sistema visual. Comienza a manifestarse claramente debiendo estirar el brazo para alejar lo que se esté leyendo o acercarse a un lugar más iluminado para poder ver con claridad.
El doctor Fernando Giacomini, médico del Hospital Oftalmológico Santa Lucía, sostiene que la presbicia no es una patología, sino un proceso fisiológico relacionado íntimamente con la edad, consecuencia del desgaste del sistema de acomodación visual.
"El ojo tiene una capacidad de acomodar, que en los menores de 40 años permite enfocar objetos a distintas distancias. Con el paso de los años ese mecanismo se altera y se pierde la capacidad de enfocar de cerca, conservando intacta la visión lejana, por eso es necesaria una ayuda óptica", advierte el profesional.
Para corregir esta alteración y disfrutar de una buena calidad visual existen lentes de contacto multifocales que permiten al paciente présbita ver correctamente de lejos, de cerca y a distancias intermedias.
El hecho de no utilizar la debida corrección, podría producir además, otros trastornos visuales como dolores de cabeza y pesadez de párpados, resultado del esfuerzo al que se expone el ojo o el sistema visual para enfocar con mayor nitidez.
Es muy importante usar la graduación que corresponde para cada una de las distancias. Giacomini, quien también colabora como asesor médico en Bausch & Lomb, explica que las lentes multifocales de la compañía permiten una visión excepcional a cualquier distancia gracias a su diseño innovador que facilita una excelente adaptación con cómodo enfoque natural.
Existe en algunas personas temor a ponerse una lente dentro del ojo, pero la práctica se adquiere rápidamente obteniendo con su uso gran comodidad. Además al ser una lente de hidrogel de bajo contenido acuoso, tiene mínima deshidratación, ofreciendo al paciente mayor desempeño de la lente al final del día.
Siempre es necesario que un médico oftalmólogo indique una receta para la compra de este tipo de lentes, pero a su vez la tarea del contactólogo también es fundamental, remarca Giacomini. "Es importante que el contactólogo enseñe al paciente a colocar y quitar la lente y ofrezca las instrucciones necesarias acerca del cuidado y uso de las lentes de contacto".
El avance tecnológico hizo posible que la presbicia se pueda sobrellevar sin inconvenientes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario