El transbordador inició hoy el regreso y se prevé que llegará el viernes próximo, tras haber reparado el telescopio espacial Hubble, en una misión que costó 220 millones de dólares, informó la agencia espacial estadounidense NASA
Durante siete días, el Atlantis proveyó al Hubble de una serie de nuevos instrumentos y cámaras de alta tecnología, que aumentaron 90 veces su poder y prolongarán su vida útil hasta 2014, cuando será desactivado por control remoto.
El telescopio, de 13 toneladas, fue puesto en órbita en 1990 y desde entonces completó más de 97 mil viajes en torno a la Tierra, en los que dio a los científicos vistas inéditas de las profundidades del Universo.
Además fue el primer instrumento que fijó la edad del universo en 13.700 millones de años y que analizó la composición química de la atmósfera de planetas más allá del sistema solar, según lo informado por la Nasa en su página de internet.
También logró obtener imágenes directas de planetas que orbitan a otra estrella y sus datos ayudaron a develar la existencia de la materia oscura.
Sus imágenes de choques de galaxias y de nacimiento y muerte de estrellas ofrecieron evidencia firme de la existencia de los agujeros negros y confirmaron teorías sobre el origen y formación del universo.
Puesto que tras 19 años sus instrumentos sufrieron varias fallas, para repararlo fue necesario que el Atlantis encarara esta misión, que incluyó varias caminatas espaciales y la introducción del telescopio en su bodega.
Los astronautas arreglaron su Cámara Avanzada de Reconocimiento -la más importante del Hubble- e instalaron un espectrógrafo de última generación, que sirve para medir la formación química, las temperaturas y los movimientos de objetos celestes.
También colocaron nuevos instrumentos y recubrimientos térmicos, reemplazaron los giroscopios, las baterías y una unidad que almacena y transmite datos científicos a la Tierra.
La reparación exterior fue llevada a cabo durante cinco caminatas en las cuales se reemplazó la Cámara Planetaria de Gran Angular 2 por la nueva Cámara Planetaria de Gran Angular 3 (WFC3).
Se trata de la primera cámara pancromática del Hubble diseñada para tomar imágenes en un campo de visión amplio y en colores, con extraordinaria nitidez.
La WFC3 permitirá a los astrónomos continuar sus estudios sobre energía y materia oscura y buscar galaxias remotas que hasta ahora estuvieron fuera del campo de visión del telescopio.
También se instaló el Espectrógrafo de Orígenes Cósmicos (COS) diseñado para ayudar a analizar la evolución de las galaxias, la formación de planetas y los elementos que se requieren para la vida.
Cumplida la reparación, el Atlantis impulsó al telescopio a una altitud mayor, desde donde quedó hoy en órbita y listo para seguir asombrando al mundo con sus imágenes, mientras el transbordador Atlantis iniciaba su regreso a la Tierra. Fuente: Télam
Durante siete días, el Atlantis proveyó al Hubble de una serie de nuevos instrumentos y cámaras de alta tecnología, que aumentaron 90 veces su poder y prolongarán su vida útil hasta 2014, cuando será desactivado por control remoto.
El telescopio, de 13 toneladas, fue puesto en órbita en 1990 y desde entonces completó más de 97 mil viajes en torno a la Tierra, en los que dio a los científicos vistas inéditas de las profundidades del Universo.
Además fue el primer instrumento que fijó la edad del universo en 13.700 millones de años y que analizó la composición química de la atmósfera de planetas más allá del sistema solar, según lo informado por la Nasa en su página de internet.
También logró obtener imágenes directas de planetas que orbitan a otra estrella y sus datos ayudaron a develar la existencia de la materia oscura.
Sus imágenes de choques de galaxias y de nacimiento y muerte de estrellas ofrecieron evidencia firme de la existencia de los agujeros negros y confirmaron teorías sobre el origen y formación del universo.
Puesto que tras 19 años sus instrumentos sufrieron varias fallas, para repararlo fue necesario que el Atlantis encarara esta misión, que incluyó varias caminatas espaciales y la introducción del telescopio en su bodega.
Los astronautas arreglaron su Cámara Avanzada de Reconocimiento -la más importante del Hubble- e instalaron un espectrógrafo de última generación, que sirve para medir la formación química, las temperaturas y los movimientos de objetos celestes.
También colocaron nuevos instrumentos y recubrimientos térmicos, reemplazaron los giroscopios, las baterías y una unidad que almacena y transmite datos científicos a la Tierra.
La reparación exterior fue llevada a cabo durante cinco caminatas en las cuales se reemplazó la Cámara Planetaria de Gran Angular 2 por la nueva Cámara Planetaria de Gran Angular 3 (WFC3).
Se trata de la primera cámara pancromática del Hubble diseñada para tomar imágenes en un campo de visión amplio y en colores, con extraordinaria nitidez.
La WFC3 permitirá a los astrónomos continuar sus estudios sobre energía y materia oscura y buscar galaxias remotas que hasta ahora estuvieron fuera del campo de visión del telescopio.
También se instaló el Espectrógrafo de Orígenes Cósmicos (COS) diseñado para ayudar a analizar la evolución de las galaxias, la formación de planetas y los elementos que se requieren para la vida.
Cumplida la reparación, el Atlantis impulsó al telescopio a una altitud mayor, desde donde quedó hoy en órbita y listo para seguir asombrando al mundo con sus imágenes, mientras el transbordador Atlantis iniciaba su regreso a la Tierra. Fuente: Télam
No hay comentarios:
Publicar un comentario